Aún hay esperanzas de hallar gente con vida, pero los rescatistas admiten que trabajan contrarreloj y bajo condiciones adversas.
Las búsquedas en el área del Abruzzo (centro de Italia) donde hasta el miércoles pasado se levantaba el hotel Rigopiano siguen sin pausa, a cinco días del alud que lo arrastró y con pocas esperanzas de hallar todavía a alguien con vida en algún «bolsón de aire» entre la nieve, los desechos y las estructuras del hotel.
Hasta ahora hay 11 sobrevivientes, seis muertos (el último identificado el domingo) y 23 desaparecidos.
Los operativos de rescate se realizan bajo condiciones extremas, muy difíciles y sin que se hayan registrado señales de vida en las últimas 36 horas.
Los equipos de emergencias trabajan con la «hipótesis operacional» de que las toneladas de nieve que aplastaron el Hotel Rigopiano el 18 de enero podrían no haber alcanzado todas las partes de la estructura, por lo que aún podría haber sobrevivientes debajo, explicó Luca Cari, portavoz de los bomberos.
